Eneldo: mítica planta medicinal y aromática
Las especies con propiedades curativas han estado rodeadas de un halo de misterio desde tiempos inmemoriales, y a muchas de ellas se las ha relacionado con el mundo mágico. En el Imperio Romano, el eneldo era consumido por los gladiadores preparado en infusión, porque se creía que aumentaba la fuerza física, y en el Egipto faraónico ya se mencionaba en los libros.
Es originario de climatologías suaves, en concreto de Asia menor, norte de África y Europa meridional. En España crece naturalmente en el valle bajo del Ebro y en Andalucía. Como cultivo la encontramos en Europa, India, Pakistán y Estados Unidos.
Es una planta anual y herbácea, de la familia de las umbelíferas. Tiene el tallo erecto y ramificado en su parte superior, de donde nacen las flores, entre 15 y 20, pequeñas y de color amarillo. En buenas condiciones puede llegar a superar el metro de altura.
Algunos cuidadosPara su correcto mantenimiento debemos tener en cuenta ciertas condiciones necesarias:
El eneldo necesita, para su desarrollo óptimo, un terreno humífero, es decir, rico en humus. Este suelo, además de fértil, debe ser ligero y tener buenas condiciones de drenaje.
No aguantará ambientes muy fríos, extremadamente secos o demasiado lluviosos. Debemos mantenerlo en condiciones moderadas, donde no haya extremos con respecto al clima.
Siendo una planta de fácil adaptabilidad, sí es susceptible a los vientos fuertes, así como a las heladas.
La propagación se realiza por semillas, alrededor de febrero o marzo, y teniendo en cuenta que aún puede volver el frío y estropear el cultivo, en cuyo caso podemos esperar, pero si deseamos conseguir de esta nueva planta más semillas no debemos plantar más tarde del mes de abril.
Es una planta anual y herbácea, de la familia de las umbelíferas. Tiene el tallo erecto y ramificado en su parte superior, de donde nacen las flores, entre 15 y 20, pequeñas y de color amarillo. En buenas condiciones puede llegar a superar el metro de altura.
Algunos cuidadosPara su correcto mantenimiento debemos tener en cuenta ciertas condiciones necesarias:
El eneldo necesita, para su desarrollo óptimo, un terreno humífero, es decir, rico en humus. Este suelo, además de fértil, debe ser ligero y tener buenas condiciones de drenaje.
No aguantará ambientes muy fríos, extremadamente secos o demasiado lluviosos. Debemos mantenerlo en condiciones moderadas, donde no haya extremos con respecto al clima.
Siendo una planta de fácil adaptabilidad, sí es susceptible a los vientos fuertes, así como a las heladas.
La propagación se realiza por semillas, alrededor de febrero o marzo, y teniendo en cuenta que aún puede volver el frío y estropear el cultivo, en cuyo caso podemos esperar, pero si deseamos conseguir de esta nueva planta más semillas no debemos plantar más tarde del mes de abril.
En la cocina y la herboristeríaEl eneldo es muy común en gastronomía, así como en preparados de herbolario contra distintas dolencias:
Se usa sobretodo en aderezos para pescados en la zona de Europa Continental, no sólo por su sabor, sino también porque ayuda a su digestión.
Las flores secas sirven para fabricar vinagre de eneldo, que se utiliza sobre todo en las conservas de pepinillos.
Si queremos añadir sus hojas a nuestros guisos lo haremos al final, ya que de otro modo perdería su sabor y sus propiedades aromáticas.
Como planta medicinal tiene cualidades antisépticas, digestivas, sedantes y contra las hemorroides.
Sus semillas se utilizan a menudo en tisanas para ayudar a la digestión.
Con ella también se realizan jabones y pomadas.
Al cultivar eneldo cultivamos un tesoro. Nos hará disfrutar con su aroma y su sabor, con la satisfacción de haber participado en el proceso desde que sólo es una pequeña semilla, hasta que termina en nuestra mesa.
Entradas
